La sonrisa del Gato hace que el ratón olvide cual es su esencia... y baje la guardia.
domingo, 26 de abril de 2015
sábado, 25 de abril de 2015
Tiempo para un presente
Entre las lágrimas por el ayer y las sonrisas pensando en el mañana hay un tiempo que no podemos olvidar: hoy.
Si llorando un pasado sonreímos a un futuro, se nos gasta el tiempo sin invertirlo en el presente, y así las sonrisas no acontecen y las lágrimas no cesan...
jueves, 23 de abril de 2015
Princesa y Dragón
Es un poco raro vivir en un pueblo que
tiene su propio dragón... Bueno, en realidad creo que es más nuestro de lo que
creemos. Apareció un día, cierto es... Pero eso de que venía de otro pueblo,
pues como que no lo tengo claro...
A mí me da que éste viene directamente para
nosotros, por nosotros...
Hay quien teme al fuego que emana de su
boca, hay quien sufre de pavor al ver sus dientes, y también quien tiembla solo
de pensar en sus poderosas zarpas.
A mí me parece, la verdad, que es un
dragón con presencia. Con un saber estar que en otros dragones jamás antes vi,
una seguridad y una confianza en sí mismo que realmente me encandila, me da envidia.
Y creo que eso me asusta más que su fuego: no duda, no hay titubeo alguno en su
actuar.
Los animales mueren entre sus fauces
asumiendo un destino certero. Hay sumisión, no dudan sobre lo que va a pasar:
la sombra del Dragón les gana en fuerza y dimensión, y ellos abrazan su destino
sin prácticamente protestar. En cambio nosotros, cedemos al miedo. Buscamos
donde encerrarnos desando que desaparezca, sin asumir que no va a ser así… Y por no morir elegimos una vida que no vivir:
encerrados en paredes que se ven absurdas para luchar contra el Dragón. Y no
reaccionamos… Nos sentamos a temblar esperando que se solucione todo al soplar
una Amapola o al desearlo al temblar.
Miedos y penas acumulados en el aire, se
respira en color gris y negro y te ahogas, intentando respirar un aire que
desprecias porque te llena de desmotivación.
Y no se puede sucumbir, no podemos
permitirlo más. Cada uno elige su destino y cómo afrontarlo, y yo me cansé de
llorar. No hay sorteos que valgan porque yo elijo mi destino, y ya no veo más
opciones que mirar de frente al miedo y enfrentarme a él.
Y no vale la pena vivir así. Entre
lágrimas, temblores y una inyección de valor me encuentro ante su cueva. No hay
sorteos ni azar, es mi propia decisión. Su inmensidad se hace presente ante mis
ojos, y mis pupilas se dilatan pretendiendo aparentar. Controlo el temblor de
mis piernas y mantengo firme la mirada. Sus ojos se clavan en lo míos y la
ironía de su sonrisa crece con cada respiración. Pasamos así un rato
indefinible y siento como si le robara su valor. Rojo color fuego son sus ojos
que se clavan en mí pretendiendo hacerme arder… Mas no va a ser así: ¡No lo
podrás conseguir!
Y el rojo de su fuego es cada vez menos
intenso, y mantener la mirada ya no resulta costoso, va cobrando ese misterio
que descubro en su sonrisa: camuflada de ironía pero de nervios e incerteza
llena. Ambos teníamos clara mi desventaja imaginaria, y en mis ojos se
cuestiona la realidad de dicha apreciación.
Su presencia no es tan firme, ni la mía
languidece. Ya nada es lo que aparenta, la verdad sobre nosotros se cierne. Su
postura cambia y el dragón empequeñece y justo entonces no es otro que San
Jordi quien aparece…
Inoportuno como siempre anhelando medallas
de ajenas batallas. Blandía ya su lanza y para atacarse se preparaba, sin mirar
y sin fijarse en nada.
¡Para! ¡No es tu batalla! Mantente al margen,
caballero, y no pretendas salvarme de aquello en lo que creo. De mi fuerza, de
mi valor, de derrocar la dictadura del pavor.
Quédate y mira si
lo deseas, y espera que soluciones ésto, que libre mis batallas. Y cuando acabe
con ello podré ser tuya si así lo deseo. Pero no puedes salvarme de mis miedos,
de mis batallas y mis deseos. Esto es mío caballero y con esto y más, puedo…
Si te necesito no dudaré en llamarte, sé
que estás, pero no precipites tus andanzas salvando a quien no se ha perdido.
Espera paciente, caballero, cuando mis batallas libre podré escucharte.
La mirada del Dragón ya no es tan fuerte,
ya casi ni duele. La rabia que lo magnifica desaparece ante mis ojos, por mis
ojos… y cuando al acariciarlo se funde, entiendo qué es lo que quiero: mi vida
en mí, conmigo y por mí. Asumiendo el miedo, cogiendo mi fuerza y dejándome
ayudar, aprendiendo a escuchar.
Es
ahora caballero, cuando te puedo sentir, sin batallas en medio que quieras
librar por mí.
FELIZ DIADA DE... ¿SANT JORDI?
FELIZ DIADA, VUESTRA DIADA
martes, 14 de abril de 2015
Como una rata Tonta
Como la “Ratita presumida”: como esa ratita que se gastó todo su capital en ese lazo, y lo necesitaba para sentirse guapa. Porqué necesitaba olvidarse de su escoba y su escalera para que su cola luciera contenta: enlazada en rosa. Así me sentía…
Necesitada de que todos los
animales del lugar se pararan a mirarme, se entretuvieran a desearme, a
mentirme diciéndome cuanto me podrían Amar, o diciéndome cuanto me harían
disfrutar. Así me sentía de estúpida: esperando que mientras barro alguien me
ofrezca un plan mejor que sola no me atrevía a hacer.
Así me lloro: como un roedor
absurdo cuyo cuento nadie se molestó en escribir. Perdida entre gatos cansada
de esquivar lindas ratitas de sincero sentir.
Aún más tonta que rata por
regalar mi cola a cualquiera y rechazar al que pedía mis ojos y mis sonrisas.
Luciré digna mientras tenga un
lazo que ponerme y un tacón donde
perderme.
Y si barriendo mi escalera, ruedo abajo y no sé dónde voy a parar, probablemente
me volveré a levantar.
Y me descubro haciendo hipótesis
donde antes hice afirmaciones, y titubeando ensayos de palabras que antes fuero
tajantes afirmaciones.
Tal vez de tanto barrer me entró
alergia al polvo, esperando a que llegara algún galán con un aspirador.
Pues mi capital lo invertí en
lazos y ahora me toca fregar: fregar el
rastro que dejaron mis deseos, mi falta de conciencia en mi actuar.
Imagen obtenida de:
http://www.educa2.madrid.org/web/centro.cn.perales/recursos/-/book/cuentos-infantiles;jsessionid=811386D16050DB02273A49C7B5F4CA17?controlPanelCategory=portlet_book_viewer_WAR_cms_tools&_book_viewer_WAR_cms_tools_chapterIndex=a9c9133b-7f35-4979-be55-368973d90c3f
domingo, 12 de abril de 2015
Mis momentos, Nuestros momentos
Los momentos que para mi guardo,
los instantes en que en mi piel ardo...
No son otros que recuerdos,
imágenes de tí almacenadas,
relatos de nuestras vidas pasadas.
Son momentos que guardé,
esperando encontrarlos al final del viaje,
y tratarlos como si de rubíes se tratase.
Esa libreta donde anoto los deseos
que a veces coinciden con recuerdos
y sonrío mariposeando ratos nada breves.
Necesito escribirlos con tinta perenne
porque tal vez el mejor lugar donde guardarlos
no sea mi mente.
Recuérdame en tus letras que te Amé,
para que mis ojos lo recuerden,
aunque está grabado en mi piel
con letras incandescentes.
los instantes en que en mi piel ardo...
No son otros que recuerdos,
imágenes de tí almacenadas,
relatos de nuestras vidas pasadas.
Son momentos que guardé,
esperando encontrarlos al final del viaje,
y tratarlos como si de rubíes se tratase.
Esa libreta donde anoto los deseos
que a veces coinciden con recuerdos
y sonrío mariposeando ratos nada breves.
Necesito escribirlos con tinta perenne
porque tal vez el mejor lugar donde guardarlos
no sea mi mente.
Recuérdame en tus letras que te Amé,
para que mis ojos lo recuerden,
aunque está grabado en mi piel
con letras incandescentes.
martes, 7 de abril de 2015
Esa Niña especial...
Hay alguien en el Mundo a quien tienes que cuidar, mimar, proteger y Amar por encima de todas las demás personas, más que a ninguna otra cosa: A TÍ.
A esa niña que tienes, que fuiste, que eres. Esa niña a quien si tú no cuidas nadie lo hará por tí. No puedes pretender Amar sin Amarte ni que te Amen sin Amarte.
Enamorate de tí, y podrás enamorarte de él...
Nunca olvides lo especial que eres, abraza y Ama los detalles que te hacen diferente, que convierten tu esencia en la más única y especial de todas.
A esa niña que tienes, que fuiste, que eres. Esa niña a quien si tú no cuidas nadie lo hará por tí. No puedes pretender Amar sin Amarte ni que te Amen sin Amarte.
Enamorate de tí, y podrás enamorarte de él...
Nunca olvides lo especial que eres, abraza y Ama los detalles que te hacen diferente, que convierten tu esencia en la más única y especial de todas.
miércoles, 1 de abril de 2015
Las Sombras de Alicia
Alícia, entre sus sombras,
quiere ver sonrisas
de verdad...
de las que se sienten,
de las que se tocan,
de las que están.
Harta de vivir tras un espejo
que le hace ver las cosas al revés
No quiere tener que dar
la vuelta a nada
y ver todo (por fin) tal y como es:

Añora recuperar el rosa
que hace tiempo perdió,
ensombrecida en blanco y negro
le cuesta más sonreír.
Y busca una salida
que le haga sentirse vivir
Los lustros que cambié
Plantada ante el reloj,
intento que su sonido
me ayude a conciliar un sueño
que hace años regalé al tiempo:
Cambié lustros por minutos
para estar a tu lado...
y ahora se me ha parado el reloj
y no veo ni hacia donde ando.
Consumido el tiempo en el anhelo,
hipnotizo agujas sin "tic tac"
intentando que vuelvan a sonar.
Pero te regalé mi tiempo:
te lo di a ti confiando en tu buen juicio
y en lugar de ponerle un marco,
de cuidarlo y perpetuarlo,
lo arrojaste al Mar sin ni tan siquiera cuidar
el momento de lanzarlo.
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